Según varios estudios y análisis, nuestro país es uno de los territorios con más potencial para desarrollar energías limpias. Esto sucede por varios factores, pero principalmente por sus condiciones geológicas y climáticas.
Es común escuchar y leer noticias que hablan sobre el desarrollo de algún proyecto energético dentro del país, generalmente asociado a la producción de energías limpias. Pero, ¿por qué resulta tan frecuente?
La respuesta radica en el enorme potencial que tiene nuestro país para desarrollarlas, potencial que estudios de todo el mundo han notado. Un ejemplo de ello es el análisis realizado por Bloomberg, el cual ubica a nuestro país como el mejor país emergente para invertir en Energías Renovables No Convencionales (ERNC).
“Los excepcionales recursos naturales de Chile lo hacen atractivo para la inversión en energía limpia. El Gobierno ha establecido ambiciosos objetivos a largo plazo para agregar capacidad de energía limpia”, señala el sitio web.
¿Cuáles son esos recursos con los que cuenta el país? Nuestro gran desierto es uno de los más conocidos, capaz de albergar una gran cantidad de proyectos de energía solar.
Energía solar en el desierto más árido del mundo
Una de las principales fuentes de ERNC proviene desde el norte del país, área que comúnmente suele ser más calurosa que las demás. Pero el calor no lo es todo, ya que durante el año cerca del 80% de los días son soleados y despejados, lo que facilita la instalación de paneles fotovoltaicos de distintas capacidades.
La enorme cantidad de luz solar hace que la generación de energía solar en Chile sea mucho más alta que en otros países, lo que ha permitido la llegada de enormes proyectos que prometen aumentar la capacidad eléctrica para este tipo de energía, la que en 2019 llegaba a 2,7 GW.
Uno de los más recientes fue la planta de Concentración Solar en Potencia (CSP) instalada en Cerro Dominador, a 100 kilómetros de Calama. En un terreno de 1.000 hectáreas, están dispuestos 10.600 heliostatos, 392.000 paneles solares y una torre de 250 metros de altura, los cuales son capaces de generar energía suficiente para 380.000 hogares al día.
Este potencial solar es el mismo que pretende expandirse en el sector minero, uno de los que más consume energía a nivel nacional. La última iniciativa ligada a esto es la que está impulsando el Ministerio de Energía, que pretende abastecer de energía solar a la minería a pequeña escala.
El poder del viento
Otro factor que le otorga gran potencial energético a Chile es la fuerza que alcanza el viento en ciertos sectores, principalmente en los cercanos al mar. Como nuestro país tiene largos kilómetros de costa por su particular estructura territorial, el desarrollo de la energía eólica es muy posible.
Es por eso que desde el 2001 se han venido desarrollando distintos proyectos que han convertido al país en el segundo productor de energía eólica de Sudamérica tras Brasil. Según la Revista Electricidad, durante este 2021 comenzarán a operar 19 proyectos los cuales elevarán la capacidad actual de 2.527 MW a 4.447 MW hacia final de año.
Esto podría aumentar la participación actual de este tipo de energía en la matriz nacional, la cual ocupa únicamente el 9,6% de la generación.
Sin embargo, según una investigación liderada por la Universidad de Aysén, el potencial de la energía eólica podría ser aún mayor si es que se considera la capacidad de trabajar en una variante marina. Esto quiere decir, la instalación de parques eólicos en zonas marítimas, lugar en donde la potencia del viento puede ser mucho mayor.
¿Cómo beneficia esto a la producción de hidrógeno verde?
El aumento en el desarrollo de ERNC como la solar y la eólica resulta de gran importancia para la producción del hidrógeno verde, el combustible que muchos señalan como la solución sustentable del futuro.
¿Cómo se explica esto? La razón está en que, para producir este combustible de forma 100% sustentable, es necesario utilizar grandes cantidades de energías limpias que permitirán que el proceso conocido como hidrólisis (separación del hidrógeno y oxígeno) suceda.
Como ya se ha mencionado, Chile tiene un gran potencial en el desarrollo de ERNC, por lo que la producción de hidrógeno sería más sencilla que en otros países. Por esta razón, el gobierno ha trabajado en una Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde, la cual pretende posicionar a Chile como uno de los tres exportadores más importantes del mundo para 2040.
El camino a seguir por Chile
No obstante, para avanzar en el desarrollo de energías nuevas y limpias hay que trabajar en otras áreas relevantes. Según señala Bloomberg en su apartado para hablar de nuestro país, una de las barreras que impiden un avance más rápido tienen que ver con la interconexión eléctrica.
Actualmente, a pesar de que Chile tiene un Sistema Eléctrico Nacional (SEN) que abarca un amplio territorio, no alcanza para enviar grandes cantidades de energía desde el norte hasta el centro o sur del país, por lo que es necesario trabajar en más proyectos ligados a la transmisión energética.
Afortunadamente, Energía ha puesto en marcha diferentes proyectos relacionados con esta área en diferentes partes del país, como el que tendrá lugar en Los Lagos dentro de poco, por ejemplo. Con ellos, además de mejorar la calidad y estabilidad del suministro de muchos hogares, permitirá la aparición de más proyectos de ERNC.
FUENTE: elmostrador.cl